Erick Argueta Generacion 83-86 - El Prefecto Miguel Angel

Una batalla campal.

Hoy alguien me hizo recordar a Miguel Angel, un prefecto de mi generacion, era chaparrito y Moreno, cabello bastante lacio y me recordaba al Puas Olivares, tenia las patas chuecas y al pronunciar palabras con la letra ese se le escapaba un silbidito medio chistoso. Era para mi lo que describiria como un buen tipo, era amigo de todas las chavas de la secu, jamas supimos que se pasara de listo con ninguna de ellas como lo hicieron algunos profesores (yo conoci a muchos que les metian mano a las niñas pero eso es otra historia). Miguelon le deciamos y era a todo dar, recuerdo que el Chori siempre andaba en el patio quitandonos nuestras pelotas de esponja con las que jugabamos tochito o nuestras pelotas y balones, pero el buen Miguelon despues del descanso nos las devolvia siempre, jamas vi que llevara a nadie reportado a la direccion el al contrario de los demas siempre dialogaba con nosotros. Era muy comun verlo los dias 14 de febrero tapizado de corazones rojos que le regalaban las chavas de la escuela.

De entre las muchas anecdotas que tengo en mi secundaria hay una en la que tuvo que ver Miguelon, era el mes de diciembre lo recuerdo bien porque estabamos en los ensayos de la pastorela de 1985 en la que participe, estabamos jugando tochito los de mi grupo el 25-V contra los del 21-V en eso en una jugada medio apretada empezo la discusion y empezaron los jaloneos y dimes y diretes, entonces como ya les habia contado en otras ocasiones pues mi deporte favorito eran las trompadas, y como vi una oportunidad perfecta de descontar a alguien me meti y que se arman los catorrazos, mis compañeros sabian que yo era buenisimo para el trompo asi es que de inmediato me pusieron por delante y se armo la trifulca, y en la bola me enrede con uno medio grandotes del 21-V la verdad no recuerdo su nombre pero se puso dura la cosa, llovian patadas y trompadas por todos lados, en una de esas este cuate que me agarra de los pelos y me bajo la cabeza hasta su rodilla y yo sabia muy bien que me iba a agarrar a rodillasos en la cara, por lo que puse mis brazos abajo y en cuanto me dio el primer rodillazo que le agarro la pierna y lo tiro al suelo pero ya estaban sus demas compañeros sobre mi, todo esto ocurrio junto al asta bandera a la hora del recreo, se han de imaginar que toda la escuela corrio gritando TIRO TIRO TIRO y los maestros al ver que era una batalla campal pues salieron a separar a todos, se puso muy violento el asunto y la adrenalina se respiraba en el ambiente, cuando tire al suelo a este cuate me llegaron por todos lados las patadas y golpes, lo unico que hice fue enconcharme y empezar a soltar golpes a ver si podia conectar a alguien, en eso senti que mi puño encontro el rostro de alguien y al voltear a ver a la victima vi al Miguelon en el suelo con las manos en la nariz y bañado en sangre, entonces senti como que el alma se me fue del cuerpo y entonces si senti adrenalina por todos lados, la verdad la bronca siguio pero yo me agache para levanter al buen Miguel y ponerlo en pie, poco despues llegaron los maestros a separar a todos y Miguel me dijo: No viste quien fue? Le dije no, la verdad yo ni cuenta me di, y lo lleve a la casetita de educacion fisica para que lo curaran, en lo que los profes se llevaron a toda la bola de rijosos a la direccion, obviamente yo me salve por estar cuidadndo del prefecto y curando sus heridas (que yo mismo le habia hecho). Despues de la trifulca me entere de que a todos los que agarraron en el zafarrancho los suspendieron 3 dias y mandaron llamar a sus papas, en la confusion pues nadie se dio cuenta de que yo estaba entre los principales organizadores (cosa que la verdad no me enorgullece) y de menso les iba a decir que faltaba yo… pero al final de cuentas corri con bastante suerte, ya que de haberme suspendido a mi me tocaban por lo menos tres meses ya que a mi kardex ya le habian aumentado como dos hojas mas de tantos reportes que tenia.

Mas o menos un año despues cuandio ya ibamos en tercero estabamos echando relajo un dia con Miguelon en su escritorio y salio el tema de aquella trifulca en la que el salio lesionado y finalmente le dije que habia sido yo el que se lo surtio pero que fue sin querer, el me dijo que la verdad nos e habia dado cuenta quien fue porque el se metio a separarnos y no alcanzo a ver mas que estrellitas y lucecitas por todos lados, hoy recuerdo eso como una anecdota, se que me perdono de Corazon , lo bueno es que no paso a mayors, solo fue un moquetazo en la humanidad de alguien a quien yo considero un buen hombre.

Dedicado al prefecto Miguel…un recuerdo de alguien que lo aprecio mucho en su momento y que guarda en sus memorias un lugar especial para el.

Gracias a Hector Flores por haber traido a mi memoria a tan singular personaje.

Erick Argueta.
erick1970@yahoo.com