ENRIQUE JAVIER VACA ZENDEJAS Generación 0
Estábamos en Mar de Banda y Mar Mediterráneo.
En una escuelita muy elemental muy precaria.
Era una escuela muy pobre, teníamos los salones muy chicos y obscuros. Era una casona habilitada.
Los lunes hacíamos la ceremonia de la Bandera.
Había un árbol de tronco grueso. Ahí estaba el presidium.
También recuerdo que ponían lonas para dar clases en el patio. Pedro Díaz era matemático y si algún maestro no llegaba, entraba y decía vamos a matemáticas y empezaba a dar su clase.
De mis maestros recuerdo al Luis Gutiérrez Rojo de inglés; ayudaba al Director a formarnos
Andaba con un borrador en la mano derecha y al que desordenaba le aventaba un borradorazo.
De Civismo a Filiberto Fentanes de Oaxaca también fue nuestro maestro en la nueva escuela. Lo recuerdo con cariño porque me preguntaba y yo le contestaba bien. Usaba sombrero y vestía traje y corbata. Llegaba con su periódico Excelsior bajo el brazo. Un día me dijo que le ayudara a recoger las pruebas y yo me sentí muy bien. Fue diputado federal por Oaxaca.
Recuerdo al maestro Juan Castellanos de Biología.
Había una maestra Alicia Pardiñas. Era un cuerazo; era de parar la gente en la calle. Ella también nos acompañó en nuestro desfile por la calle a la nueva escuela.
Luego nos dieron los locales de la Secundaria Albert Einstein.
El día en que nos cambiamos, nos fuimos caminando formaditos por la banqueta.
Yo estuve en la inauguración.
Llegamos de una escuela muy pobre a una muy moderna, preciosa, maravillosa.
Al poco tiempo Jesús Mastache Román fue nombrado Director.
Al maestro Tadeo de la Garza lo nombraron subdirector.
El maestro Pedro Díaz fue enviado a la Secundaria 16 allá por Lecumberri.
Luego, Pedro Díaz fue nombrado jefe de la Matemáticas para todo el país.
Lo fui a ver para que mi hermano entrara a la Secundaria 25 y me ayudó.
Estoy enterado del Desayuno del 60 Aniversario y ahí estaré.
Ya tengo mi Boleto.
Contacto:
José Filiberto Ney
filibertoney@yahoo.com.mx
1 Comments:
Gracias por compartir esta anécdota, sin duda una de las más legendarias.
Un abrazo, será un honor conocerte en el desayuno
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