Carmen Presa Cerrito Gen70-73 - Calaveritas

Estimado Alberto:Te envío una "calavera" que hice con cariño para nuestra escuela.

Por fin se llegó el día
que la parca tanto ansiaba
y del panteón se dirigía
hacia la 15 secundaria.

Muchos años han pasado
que de la escuela salió
pero nunca se ha olvidado
de lo que en ella aprendió.

A los maestros los recuerda
con cariño y gratitud
por las horas dedicadas
al cumplir con su misión.

Honda nostalgia y gran emoción
esconden su voz tenebrosa, al cantar;
"recuerdos de mi escuela
y de mi juventud,
la quince se venera
llena de ensoñación"

Alegre ya va llegando
a la puerta principal
y con cierto disimulo
se acerca para entrar.

Lentamente ya recorre
cada pasillo y salón,
en su mente se ve a sí misma
sentada ante el pizarrón.

Muy atenta siempre estuvo
a todo lo que le enseñaban,
le gustaba mucho, mucho
el mundo que le mostraban.

Su esquelética figura
a todos causa temor,
pero ella muy sonriente
los saluda con amor.

Ya se dirige a los talleres
donde un oficio aprendió,
el complemento perfecto
para su mejor preparación.

En la hora del descanso
a menudo se sentaba,
debajo de un árbol muy alto
que en el jardín se encontraba.

No ha perdido la costumbre
ya camina para allá,
y como en los viejos tiempos
se sienta a descansar.

Gratos recuerdos le llegan
de su estancia en el lugar,
quizás lo mejor de la vida
!cuando se empieza a soñar!

El tiempo no ha borrado
todo el bien que le brindó,
a través de ratos placenteros
y también de desazón.

!Profundo suspiro,
escapa de su pecho!
agradeciendo a la vida
por tan cálidos momentos.

! De pronto !...
la realidad se presenta
y con una paradoja
su mente se despierta.

!ansiaba tanto este día!
para poder visitar,
el lugar que muchos dicen
sintieron tristeza al dejar.

!cuánta razón tienen todos!
de añorar con tanto afán
los momentos vividos en ella
y que fortalecieron su andar.

!grata experiencia! -se dice-
el sentir la vida en pleno,
qué pena que muchos, viviendo,
! lleven la muerte por dentro!

Para algunos represento,
el final de un caminar,
un triste hueco en su vida,
!un gran vacío existencial!

Pero ...
En verdad, ¿soy el final de la vida?
No seré acaso, un nuevo despertar?
Con nostálgica mirada
recorre toda la escuela,
se siente muy honrada
de formar parte de ella.

En su rostro se dibuja
una mueca singular,
con sigilo ya se marcha
muy contenta del lugar,
Pues sabe que algún día
a todos nos ha de llevar.

P.D. Ojalá les guste. Disculpas por hacerla tan larga aquí mismo y no en un archivo adjunto.

>>>>> Estimada Carmen: Gracias. Genial. Esta es tu calavera:

CARMEN PRESA CERRITO

Cuando la Flaca leyó
De CARMEN su calavera,
Corrió para hacerla PRESA
Pero nunca la encontró.

La buscó en la Secundaria
Y se enteró en un ratito
Que por tumba esta gran poetisa
Tenía un apacible CERRITO.

Te abrazo.