Erick Argueta Generacion 83-86 - A escoger un taller
Eso de encontrar tu vocacion es lo mas dificil que he tenido que hacer, no se, quiza porque queria ser todo a la vez, clasico que de niño quieres ser doctor, bombero, agente de la CIA, astronauta y un monton de burradas, pero la decision inicial empieza cuando en la secundaria tienes que buscar el taller al cual quieres pertenecer.
En mi caso no fue la excepcion y llego el dia, alli estabamos una bola de chamacos pubertos frente a una encuesta de aptitudes y preferencias, clasico que todos mis cuates querian entrar a electronica, electricidad, mecanica etc. Es decir todos buscaban las actividades mas varoniles que se pudieran imaginar, pero yo tenia otra tendencia, yo era mas inteligente que los demas (al menos eso pensaba yo), me di cuenta que el grueso del personal femenino de mi salon y de toda la escuela iba encaminado a un solo lugar COCINA, y dije porque no…y que encamino mis aptitudes hacia ese taller, y llene mi encuesta y la entregue, la verdad simpre he tomado la vida como una broma, solo que esta vez se fue demasiado lejos... cuando dieron los resultados y me quede en cocina no lo podia creer. Mis cuates al principio pensaron que tenia tendencias homosexuales o sea que yo era gay, tarde se dieron cuenta de su error cuando soltaron el gallo en el gallinero y empezo a hacer de las suyas, segun tengo entendido hice historia al haberme quedado en ese taller, no se si hoy se acostumbra, pero antes nunca un varon habia estado en ese taller, al principio cuando se dieron cuenta de la situacion el orientador Cuellar mando llamar a mis papas y les dijo que era poco usual ese caso, entonces yo puse mi cara de mustio y les dije: Lo que pasa es que yo quiero ser un gran Cheef asi como Rafaello (quien en aquel entonces tenia un programa en la tele y era famoso en la ciudad de mexico) todos se me quedaron viendo y a lo mejor no les parecio descabellada mi illusion la cual era totalemente falsa, yo queria seguir con mi harem particular y es que por si no lo habian notado en el taller de cocina generalmente van las chavas mas bonitas y no se porque pero ese es un patron que se repitio los tres años que estuve en la secundaria. Total que alli me dejaron en el taller de cocina y empece con mi curso, con el tiempo los que me decian que yo era gay y se burlaban de mi se dieron cuenta del error y empezaron a envidiarme, se que muchos hubieran dado cualquier cosa por estar en mi lugar rodeado de bellezas, era el paraiso terrenal aunque no todas me pelaban, alli tenia mas posibilidades que en otro lugar, cabe mencionar que mi idolo desde que era niño no era el santo, ni kaliman ni blue demon, mi idolo era Mauricio Garces asi es que yo sentia que ese era un buen inicio para mi carrera de Gigolo.
El gustito me duro como mes y medio, hasta que una vez la maestra salio a la direccion y yo aproveche para hacer de las mias y empece a besuquearme con una amiguita (el nombre me lo reservo porque los caballeros no tenemos memoria) entonces despues de eso me llevo a la direccion y alli fue cuando se me cayo el teatrito y se dieron cuenta de mis verdaderas intenciones que eran todas menos ser un gran Cheef, asi es que me dieron a escoger cualquier otro taller, el que fuera menos cualquiera que tuviera que ver con el sexo femenino, asi es que escogi electricidad y me fui para alla.
Lo bueno de todo esto es que las amiguitas que hice en ese tiempo en el taller de cocina las segui conservando, Dios me dio el don de transmitir a traves de una pluma y un papel y la verad lo aproveche al maximo con las niñas, les escribia cartas de amor, poemas etc etc etc. Dicen por alli que: “choro mata carita” y es muy cierto, segui haciendo de las mias aunque ya no estaba en cocina.
Hoy despues de 22 años mi vida esta relacionada a la cocina, desde los 17 años he trabajado en cualquier cantidad de restaurantes en la ciudad de mexico y en zonas turisticas, soy Gerente de Compras de alimentos y bebidas, llegue hasta aqui no sin antes haber sido lavaplatos, cocinero, mesero, capitan bartender es decir recorri todas las areas restauranteras, mi sueño era llegar a ser un gran Cheef y la verdad me encanta cocinar y no lo hago mal, lastima que han pasado tantos años y descubri mi vocacion demasiado tarde, ya que a los 38 años en el ramo gastronomico es demasiado tarde para empezar, asi es que lo dejare en un sueño y seguire en lo mio. Como veran lo que para mi empezo como una broma hoy se ha convertido en mi forma de vida y pensar que todo empezo porque queria tener mi propio harem…
Erick
erick1970@yahoo.com
6 Comments:
Gracias Erick.
Muy interesante y creativo.
En mi Gen nunca se nos ocurrió que un varón estuviera en cocina.
Por otro lado Sergio Maldonado “CookBear” hizo un berrinche de tres años porque el quería verdaderamente ser Chef, pero no lo dejaron y lo inscribieron en Taqui.
Terminó siendo Chef y ya tiene una carrera de muchos años.
Un a brazo.
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Gracias Alberto, fijate que dentro del contexto comico que pudiera tener mi aventura en aquel taller se esconde una triste realidad, en verdad mi intencion en ese momento no era la de ser cheef( lo confieso), aunque hoy dia mi vida gira en torno al area restaurantera, el fondo de este asunto es que en tiempos atras las personas tendian a etiquetar las profesiones y oficios, pero gracias a Dios esto al parecer ya se ha acabado, por ejemplo si algun hombre estaba interesado en dedicarse a la cosmetologia o a ser estilista se pensaba que ese era un oficio propio de mujeres o en su caso de homosexuales (lo digo con todo respeto y sin animo de ofender a nadie) yo creo que en años atras jamas nos imaginariamos a una mujer conduciendo un Taxi o un microbus (en mis tiempos eran peseros o combis verdes) tampoco imaginariamos a un caballero atendiendo pasajeros en un avion como sobrecargo.
El caso es que el primer precursor de estos cambios que yo conoci fue el Prof. Genaro Garcia Becerril ya que fue el quien dijo: si a este niño le gusta la cocina pues adelante, como veras en mi relato desde la maestra hasta mi orientador se oponian, bueno al final de cuentas solamente era una puntada de mi parte estar en ese taller, pero imaginate si en verdad ese hubiera sido mi deseo en esos momentos...como la persona que tu comentas que al final de cuentas termino siendo Cheef y me imagino que de los buenos, en fin creo que nuestra sociedad debe de tener la apertura para aceptar la diversidad de generos y terminar con esos estigmas que en algunos lugares aun hay respecto al origen, preferencias sexuales, religion etc etc.
Lastima que descubri demasidado tarde mi vocacion, hoy en dia la cocina me apasiona y trabajo en el ramo restaurantero, quiza si me hubieran dejado seguir con mi bromita hubiera encaminado mis pasos en el area gastronomica, pero tambien agradezco que hubiera alguien que me pusiera en mi lugar como lo hizo la maestra y el orientador y gracias a ello tuve que aprender este oficio como se hacia en los viejos tiempos... empezando desde lavaplatos
Un abrazo.
Erick
Gracias Alberto, fijate que dentro del contexto comico que pudiera tener mi aventura en aquel taller se esconde una triste realidad, en verdad mi intencion en ese momento no era la de ser cheef( lo confieso), aunque hoy dia mi vida gira en torno al area restaurantera, el fondo de este asunto es que en tiempos atras las personas tendian a etiquetar las profesiones y oficios, pero gracias a Dios esto al parecer ya se ha acabado, por ejemplo si algun hombre estaba interesado en dedicarse a la cosmetologia o a ser estilista se pensaba que ese era un oficio propio de mujeres o en su caso de homosexuales (lo digo con todo respeto y sin animo de ofender a nadie) yo creo que en años atras jamas nos imaginariamos a una mujer conduciendo un Taxi o un microbus (en mis tiempos eran peseros o combis verdes) tampoco imaginariamos a un caballero atendiendo pasajeros en un avion como sobrecargo.
El caso es que el primer precursor de estos cambios que yo conoci fue el Prof. Genaro Garcia Becerril ya que fue el quien dijo: si a este niño le gusta la cocina pues adelante, como veras en mi relato desde la maestra hasta mi orientador se oponian, bueno al final de cuentas solamente era una puntada de mi parte estar en ese taller, pero imaginate si en verdad ese hubiera sido mi deseo en esos momentos...como la persona que tu comentas que al final de cuentas termino siendo Cheef y me imagino que de los buenos, en fin creo que nuestra sociedad debe de tener la apertura para aceptar la diversidad de generos y terminar con esos estigmas que en algunos lugares aun hay respecto al origen, preferencias sexuales, religion etc etc.
Lastima que descubri demasidado tarde mi vocacion, hoy en dia la cocina me apasiona y trabajo en el ramo restaurantero, quiza si me hubieran dejado seguir con mi bromita hubiera encaminado mis pasos en el area gastronomica, pero tambien agradezco que hubiera alguien que me pusiera en mi lugar como lo hizo la maestra y el orientador y gracias a ello tuve que aprender este oficio como se hacia en los viejos tiempos... empezando desde lavaplatos
Un abrazo.
Erick
Saludos Erick; como siempre, haciendonos reir con tus anècdotas, aunque, confiezo que tu comentario del "Niño Fantasma" si es medio "llegador" (mes de noviembre, para los que no lo hayan leido).
Yo estuve en "Estructuras Metàlicas", pero creo que no estaba por ahì mi vocaciòn. Aunque si disfrutè muchìsimo ese taller, al final (81-82), estudiè para "chofer" de helicòpteros (decir "piloto" se me hace "darse guayabazos")
y en los 90`s estudiè odontologìa (era de los "ruquitos" de la UAM, je).
Saludos Erick, Alberto y todos los ex alumnos de nuestra secundaria.
Atte: David Fernàndez de Lara. Gen: 73-76
¡Que tal Erick! ¡que padre historia! abordas un tema muy importante el de la vocación contrapuesto con los "roles sociales" tradicionalmente impuestos a homres y mujeres, y el "escozor" que causa para algunos cuando un hombre decide realizar alguna actividad reservada para mujeres, o viceversa, afortunadamente las cosas van cambiando poco a poco, y las mujeres taxistas como microbuseras, así como lo hombres estilistas van siendo mas reconocidos y respetados. Como acostumbras nos deleitas con tus relatos pero tambien dejas muchas cosas en el tintero para refleccionar.
Un afectuoso Abrazo.
Siempre quince.
Héctor Salgado Corona.
Pues de acuerdo al comentario de Erick, parece que aunque se nos fuerce a otro destino, nuesta vocación acaba por salir y predominar ¿no?
Saludos a todos.
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